Relación entre Magnesio y Calcio
Existe una relación en el equilibrio del calcio con el magnesio. Si queremos que nuestro organismo funcione de manera correcta es imprescindible que los minerales de nuestro cuerpo estén correctamente equilibrados.
Equilibrio entre el magnesio y el calcio
Por poner un ejemplo, cuando los niveles de calcio son demasiado elevados ocurre la calcificación, cuanto menos nivel de magnesio tenemos, mayor nivel de calcio que puede llegar a provocar esta calcificación, síndrome premenstrual, estreñimiento, migrañas, piernas inquietas, etc. El magnesio es un mineral clave para la absorción del calcio.
¿Cuáles son algunos beneficios del magnesio?
El magnesio contribuye al funcionamiento normal de los músculos, disminuye el cansancio y la fatiga. Es un nutriente imprescindible para deportistas. La debilidad y falta de energía, pueden ser síntomas de una deficiencia de este mineral. El sistema neuromuscular necesita de este mineral para el buen funcionamiento de nervios y músculos haciendo que estos estén relajados.
Ayuda a mantener un ritmo cardíaco estable, una presión arterial normal y es vasodilatador, por lo que sus beneficios en el sistema cardiovascular, también están comprobados. A nivel sanguíneo evita la formación de coágulos y aumenta la producción de glóbulos blancos.
El magnesio es un mineral que favorece el tránsito intestinal, favorece el paso de las heces a través de los intestinos, con lo que podemos decir, que su carencia puede estar relacionada con el estreñimiento. En cuanto a la digestión, el magnesio neutraliza los ácidos del estómago, por lo que reduce los síntomas de acidez e indigestión.
Es necesario para la formación de los huesos, en el crecimiento y maduración ósea ya que, junto con el calcio y el fósforo, contribuye a la estructura física del hueso. Parece que las personas con una mayor ingesta de este nutriente poseen más densidad ósea, un factor determinante para reducir el riesgo de fracturas de hueso y osteoporosis.
El magnesio para la depresión y la ansiedad. El magnesio es bueno para la ansiedad y la depresión porque juega un papel clave en el sistema nervioso. Además parece que las personas que padecen migrañas (dolores de cabeza debilitantes) suelen tener niveles bajos de magnesio, especialmente durante un ataque.
Para aumentar de forma natural su ingesta, hay alimentos ricos en este mineral. Frutas como el plátano, el albaricoque y el aguacate, frutos secos como las nueces, las almendras y los anacardos, la leche, legumbres como los garbanzos, las lentejas y las judías o granos como el arroz integral, el trigo y el mijo.
