Cuidar la piel en verano
La piel es el órgano más grande de tu cuerpo, pero a diferencia de otros órganos, no cuenta con una protección natural, por lo que el calor intenso puede perjudicarla gravemente. Por ello, es imprescindible cuidar con mimo tu piel cuando llega el verano.
Algunos consejos para mimar tu piel
La alimentación es uno de los principales apoyos para el el cuidado de la piel, pues muchos alimentos pueden contribuir para prevenir la degeneración celular. Una alimentación adecuada puede estimular el flujo sanguíneo de la piel, por lo que las vitaminas y demás nutrientes que ingerimos serán vivo reflejo en una piel saludable.
La hidratación es necesaria para proteger toda la piel que cubre tu cuerpo, pero sobre todo, la piel que e encuentra en el rostro es la más fina y delicada, por lo que necesita más cuidados por lo que es necesario recurrir a productos hidratantes diariamente. La hidratación es un factor a tener en cuenta para reducir la aparición de arrugas de la cara.
Para cuidar tus ojos protégelos utilizando gafas de sol que protejan de los rayos UVB y UVA. La protección solar es fundamental para mantener una piel cuidada de los rayos del sol. Debes aplicarla unos 20 minutos antes de salir de casa, repitiendo su aplicación cada 3 horas de estar expuesta al sol en la playa o en algún balneario. Evita en lo posible la exposición al sol entre las 12 y 16 horas, ya que durante este tiempo los rayos del sol son más fuertes. No olvides el protector solar nunca, sombrero para reducir el impacto solar y proteger tu rostro, gafas y si es posible, una sombrilla.
La limpieza profunda de la piel cuando llega el verano elimina las impurezas y preparar la piel para su exposición al sol. Utiliza productos que no alteren el manto ácido de la piel. La exfoliación elimina las impurezas de la piel, siempre sin abusar, pues aunque es efectiva, realizar esta acción de forma repetitiva, hará que se debilite la piel y quede expuesta. Por supuesto no realices una exfoliación antes de ir a la playa.
