Vitamina B3, Niacinamida para tu piel
Niacina es el término que se utiliza para referirse a todas las formas con actividad vitamínica de la vitamina B3. Es el nombre genérico usado para referirse a derivados de esta vitamina, como son el ácido nicotínico y su amida, la nicotinamida (niacinamida).
Dentro del complejo de vitaminas B, cada una posee una estructura y función distinta pero que se complementan, siendo necesarias para alcanzar el bienestar físico y mental. Cuando hay déficit vitamina B3 o niacina o de su precursor (triptófano), nuestra piel puede reaccionar con manifestaciones cutáneas, digestivas y nerviosas.
¿Cúal es la utilidad?
En el organismo, participa en multitud de reacciones del metabolismo oxidativo, para la producción de energía, la síntesis de ácidos grasos, tiene propiedades antioxidantes y protege la piel de los radicales libres. Esto previene el envejecimiento prematuro de la piel. Parece tener efectos positivos para reducir eventos cardiovasculares y el avance de la aterosclerosis.
Otras propiedades reconocidas por la EFSA (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria) destaca que la niacina contribuye al normal metabolismo energético, en la función fisiológica, ayuda a reducir el cansancio y la fatiga, al mantenimiento de las membranas mucosas y de la piel y contribuye en el funcionamiento del sistema nervioso.
Beneficios de la Niacinamida en la piel
La niacinamida es fundamental para la hidratación y estructura de la piel y se encuentra naturalmente en las células humanas.
La niacina cumple una función alisante ya que puede suaviza las rugosidades o irregularidades de la piel para conseguir que sea uniforme. Por estos motivos es un ingrediente estrella en cosmética.
¿Qué efectos ejerce la Niacinamida en la piel?
Hidrata, fortalece y es un agente anti-polución: Es capaz de proteger a las células de los contaminantes comunes del aire y favorece la capacidad natural de la piel para retener la hidratación, beneficiando la barrera cutánea.
Efecto antienvejecimiento: La niacinamida actúa en la reparación del ADN y permite la producción de colágeno y elastina, ejerciendo una acción antienvejecimiento. Unifica el tono de la piel y mejora la apariencia. Actúa como modulador de la hiperpigmentación, reduciendo las manchas en la piel y manteniendo el buen tono y apariencia.
Suaviza y calma la piel: La niacinamida ejerce en las pieles atópicas un efecto positivo en la humectación de la barrera cutánea y facilita la restauración de la barrera física de la piel. Es un ingrediente empleado en cosmética para aliviar irritación y proporcionar alivio.
Niacinamida en pieles grasas: mejora el aspecto de poros dilatados, facilitando que se reduzca el tamaño de los poros y mantiene a la vez una tez hidratada. También regula y matifica las impurezas de la piel grasa. Normaliza la producción de sebo cutáneo, Modula la producción de lípidos en las glándulas sebáceas, mejorando la apariencia de la piel grasa. Es un ingrediente muy empleado en cosméticos para pieles con tendencias acnéica.
Alimentos que contienen niacina
El queso y los huevos son pobres de niacina, pero al contener grandes cantidades de triptófano, tienen un alto equivalente en niacina. Las frutas y verduras pueden proporcionar cantidades beneficiosas. Otras fuentes son los cereales integrales, el pan, el té y el café. La carne roja magra, las aves de corral, el hígado, la carne de res, de cerdo y pescado contienen altos niveles de niacina y triptófano, además de no olvidar a las legumbres y los cacahuetes, que también son importantes fuentes de esta vitamina.
¿Y si combinamos Niacinamida y Vitamina C?
La combinación de estos dos ingredientes mejora el efecto antioxidante, mejora la apariencia de la piel fotoenvejecida y disminuye la aparición de manchas. Por tanto, esta combinación de ingredientes es muy empleada en cosméticos utilizados para despigmentar y unificar el tono de la piel.
